A lo largo de nuestra vida nos podemos encontrar con situaciones que nos sobrepasan y que nos generan malestar emocional, llegando, incluso, a deteriorar nuestra salud psicológica.
En ocasiones tenemos una sensación general de insatisfacción y no sabemos por qué: ¿Qué me está pasando?, «Yo antes no era así…, Ya no puedo más…», parece que todo a nuestro alrededor se derrumba y no sabemos qué hacer ni hacia dónde ir.
A veces, por miedo o por vergüenza a mostrarnos débiles creemos que podremos solucionarlo por nosotros mismos, nos convencemos de que sólo se trata de un mal momento y de que no necesitamos la ayuda de nadie; y en ocasiones es así, pero en otras, a pesar de nuestros esfuerzos no solo no logramos volver a ser los de antes, sino que terminamos agotados mental y emocionalmente.
Pero, ¿realmente es necesario llegar al límite para darnos cuenta de lo necesario que es cuidar nuestra salud psicológica y prevenir futuros trastornos más serios? Si cuidamos nuestro cuerpo aprendiendo y practicando hábitos de vida saludable, ¿por qué no hacer lo mismo con nuestra mente?
La salud psicológica es mucho más que sólo la ausencia de trastornos mentales, significa tener una autoestima saludable, sentirse capaz de afrontar los desafíos de la vida, regular las emociones y construir relaciones sólidas.
Actúa, cuida de tu salud psicológica y emocional.
Cuidar de nuestra salud psicológica implica aprender, entrenar y desarrollar las habilidades necesarias para conseguir un nivel óptimo de bienestar emocional, y disfrutar de una vida con sentido.
Las personas emocionalmente sanas saben como mantener el equilibrio entre sus emociones, pensamientos y conductas.
El cuidado de tu salud psicológica y emocional te ayudará a enriquecer todos los aspectos de tu vida, incluida la mejora de tu estado de ánimo, y el desarrollo de una personalidad más resistente al estrés.
Aprende a gestionar tus emociones.
El ritmo de vida actual es complicado, las exigencias a las que nos vemos sometidos, ya sea por nuestro entorno o por nosotros mismos, con frecuencia terminan afectando a nuestra salud psicológica y emocional.
Miedo, estrés, enfado, insatisfacción, tristeza, frustración, inseguridad… son señales emocionales que nos avisan de que hay algún aspecto en nuestra vida que no funciona como desearíamos.
Saber identificar e interpretar estas señales es indispensable para poder poner en marcha las estrategias más adecuadas y hacer frente a la situación que nos preocupa.
La psicoterapia te da la oportunidad de aprender nuevas habilidades que te permitirán tener un mayor dominio y control personal, consiguiendo que vivas tu presente de una manera más feliz y plena.
Aprenderás a conocerte, a ser consciente de cómo tu diálogo interno determina, en gran medida, tu forma de sentir y de comportarte; aprenderás a identificar y a modificar esos pensamientos que te crean malestar y te bloquean o te impiden avanzar en la dirección que deseas.
Desarrollarás nuevas habilidades para afrontar y superar las dificultades por las que estés atravesando, pero sobretodo, te llevarás contigo una renovada “Mochila Emocional”, llena de herramientas para cuidarte y listas para ser usadas en el momento detectes la más mínima señal de alarma en tu cuerpo o mente.
Mi objetivo es acompañarte en tu proceso de crecimiento personal, facilitándote las estrategias necesarias para que puedas conocerte mejor, y seas consciente de cómo tus emociones, pensamientos y actitudes influyen en tu salud emocional.